Los excrementos de E. García Serrano

Hace tiempo que quería hablar de este "hombre". Eduardo García Serrano, radical comentarista de Intereconomía. Una persona a la que se le ocurrió literalmente llamar "zorra" y "guarra" a la consejera de Sanidad de la Generalitat de Cataluña, Marina Geli. Entre las sandeces que escupió este siniestro personaje se encuentran las siguientes palabras: "Esta tipa es una zorra repugnante", "está creando niños degenerados", etc. En el siguiente vídeo, el fragmento completo:

Lo cierto es que en el programa siguiente de El Gato al agua su director, Antonio Jiménez, salió a pedir disculpas por estas declaraciones. Un acto que le honra. Pero el "Sr." García Serrano no lo hizo hasta una semana después -y, entre medias, ya sobrevolaba una multa administrativa a la cadena de 1 millón de euros-. Lejos de toda vacilación ética sobre los valores que realmente esconden las pabras de este personaje, siete días después de su ida de lengua se escudó en su padre y pidió disculpas. Y perdonenme (si quieren), pero no me lo creo. A este hombre no me lo creo. No creo que estos insultos fueran un desliz fruto de las altas horas de la noche, la copa de vino o la calentura de un debate político. Porque si fuera resultado de tales factores, los insultos no se repetirían. Y este hombre recurre constantemente a las descalificaciones, lo que esconde detrás una ideología muy peligrosa.

Aquí la prueba de anteriores "equívocos". Entre sus excrementos intelectuales, los siguientes:

Sobre Antonio Gala: “Esa maricona vieja. Escritor, como se diría en los años 20, de modistillas. Cursi como él sólo, pedante como él solo, lacrimógeno como él solo”. (…) “Yo nunca he entendido el léxico de Antonio Gala porque en este país hay mucho hortera literario. (…) No sé si estaba en Chueca acariciando efebos, que es lo que a él le gusta”.

Sobre Zerolo: “Un maricón como tú y como todos los que te acompañaron en la manifestación del otro día, en Teherán estarían colgados. Y en Damasco no te quiero contar las atrocidades que harían con ese cuerpecito tuyo, que no sabemos si es de hombre, de mujer, de hermafrodita. Hala. Ponte el tutú, enarbola la bandera del arcoiris y a manifestarte a Damasco y a Teherán. En Tel Aviv podrías hacerlo, nadie te iba a tocar un pelo. Los judíos tienen muy buen gusto”.

Sobre los mossos de esquadra: “Panda de vagos y cagones que han tenido que llamar a la Guardia Civil en cuanto han venido los del Este, kalashnikov en mano, y han utilizado la barretina para limpiarse el culete".